Arqueología: ¿Qué son las cazoletas?
Las cazoletas en la arqueología significan un pequeño hueco artificial excavado en la superficie de algunas rocas, que generalmente tienen una sección semiesférica y planta circular, pero también se pueden encontrar en la planta cuadrangular. Las mismas pueden encontrarse de forma aislada o formando agrupaciones con otras cazoletas o acompañadas de otros grabados rupestres.
Normalmente, se encuentran grabadas en las superficies de las formaciones rocosas naturales, aunque pueden llegar a estar presentes en los ortostatos megalíticos.
La cronología de las cazoletas abarca en Europa del Paleolítico Medio hasta la Edad de Hierro.
Estas figuras son las más comunes dentro de los petroglifos, siendo sus hipótesis existentes referentes a la funcionalidad de las mismas: como símbolos de carácter sexual femenino, colectores para ofrendas, receptáculos de libaciones o de sacrificios, cartografías terrestres y de constelaciones, marcadores de espacios sagrados, marcadores de operaciones pre numéricas, tableros para juegos, entre otras.
Hipótesis también señalan que las cazoletas indican un espacio sagrado prehistórico, espacio que se habría mantenido, una vez instalado el cristianismo, con la construcción de templos o capillas en esos lugares.
Por su parte, los indios “Pomo” buscaban el poder resultante de la producción de cazoletas para curar la infertilidad.
También se consideran parte de rituales, donde participan las energías terrestres y telúricas (concavidad en las piedras y rocas, de abajo, femeninas) y las cósmicas o etéreas (de arriba, convexas y masculinas) que se yuxtaponen y se interrelacionan, se intercambian para equilibrarse y alcanzar el tono (frecuencia de percepción y recepción) para la ceremonia. Semejan a la función de las piletas de agua bendita (benditeras) en las entradas a las iglesias que facilitan la lustración y la receptividad del momento ritual, de la ceremonia a celebrar y a facilitar, en definitiva, una apertura espiritual y una alteración del estado de conciencia. Es muy posible que en los rituales de la prehistoria y de la antigüedad participaran elementos como la sangre, vísceras, tierras diluidas (pigmentos), extractos de plantas, etc.
Esther R.